http://www.expansion.com/2012/11/19/empresas/banca/1353317958.html
La Comisión Europea ha autorizado al banco holandés ING a
incumplir el plan
original de reestructuración que se vio
obligado a aceptar en 2009 para que
Bruselas autorizara en su
momento ayudas públicas de 15.000 millones de
euros. A cambio,
la entidad deberá adoptar medidas compensatorias, como
acelerar
y potenciar el crecimiento de uno de sus rivales de
banca
minorista.
Este tipo de planes de restructuración son habituales
entre
aquellos bancos que han recibido apoyo estatal durante la
crisis
financiera. Estos obligan a las entidades a desinvertir, limitan
su
agresividad comercial o fuerzan una reducción de tamaño. La
Comisión Europea
tiene que autorizar antes de fin de mes los
planes de reestructuración de
Bankia, CatalunyaCaixa,
NovaCaixaGalicia y Banco de Valencia), que obligarán
a estos
bancos a adoptar medidas similares.
El caso de INGING recibió
entre 2008 y 2009 cerca de 17.000
millones de euros en ayudas públicas, emitó
12.000 millones de
euros con aval público y un esquema de protección de
activos
para una determinada cartera por valor de 26.000 millones
de
euros. A cambio, se comprometió a remunerar apropiadamente al
Estado
holandés por las inyecciones de capital y a desinvertir
en ciertos
negocios.
Pero el Gobierno holandés anunció a principios de 2012
que
ciertas condiciones no se podían cumplir: "ING tuvo dificultades
para
pagar la remuneración por el apoyo estatal y no pudo
desinvertir en Westland
Utrecht Bank (WUB), tal y como se
preveía en 2009", asegura la
Comisión.
"En su plan de restructuración corregido, ING se compromete
a
devolver todas las ayudas públicas recibidas en 2015. La
Comisión ha
aceptado prolongar la fecha límite para la
desinversión del negocio de
seguros europeo de ING, dadas las
actuales dificultades del mercado y a las
especificidades del
negocio de ING. También han sido modificadas los modos
de
desinversión del negocio de seguros en EEUU".
Para compensar estas
medidas, Bruselas prolonga ciertas
restricciones a la estrategia de ING. El
banco holandés no podrá
realizar adquisiciones ni lanzar campañas comerciales
demasiado
agresivas. Además, deberá vender su negocio asegurador
holandés
y su filial WUB antes de 2015. sta será renombrada como NN Bank
y
competirá con ING en el mercado hipotecario. Además, según la
Comisión "ING
se ha comprometido a una serie de restricciones
encaminadas a asegurar el
éxito comercial de NN Bank.